Perdidos en la noche [Kate]

Esta vez los acotecimientos y porqué negarlo, el dinero de mis queridos clientes, me llevaron a la PM. No tenía problemas con ninguna de las discotecas de la cuidad, siempre sabía ingeniarmelas para pasarmelo bien y evadir a los que tenia que evadir encontrando a quien me convenía. Simplemente la noche era lo mio. Para variar conocía a los porteros de maravilla, cosa que me ahorraba lios en la entrada. Me dirigí hacia uno de los rincones de la discoteca donde vi un par de caras conocidas que me recibieron con el habitual entusiasmo mezclado con recelo por tener que soltar tales sumas de dinero para andar contentos del todo. Tras realizar mis primeras ventas me dirigí a la barra alegremente, cuando me senté en uno de los extremos de esta, en la zona mas apartada me abordó otro de mis habituales, uno de los dificiles pues me debía dinero y aun quería deberme mas. Enfrascado en medio de una discusión con el vi acercarse a la hermana de Lucy y las ganas de quitarmelo de encima me invadieron de mala manera, accedí a fiarle otra vez y le di su pedido acompañado de una mirada mas que fulminante mientras lo echaba de mi lado. -Mira a quien tenemos aquí... -dije como si nada cuando Kate estuvo mas cerca de mi.

Tenía mi copa en la mano cuando de pronto escuché que me hablaban a un costado.
-disculpa?- dije mirando despectivamente al chico. Lo había visto antes, él también formaba parte de mi hermandad pero yo no trataba con los de su tipo. Con ese pelo desordenado y su forma de vestir... a mi juicio lucía casi como un delincuente, guapísimo, pero un delincuente a fin de cuenta.
Rodeé los ojos y continué con mi vista en frente mirando como todos parecían divertirse bailando menos yo que tenía la cabeza nublada por todas las preocupaciones que llevaba encima. Extrañamente ya no estaba segura de seguir con Mike, el cual seguramente era el sueño de cualquier chica... pero yo derrepente comencé con las dudas e indecisiones.

Rodé los ojos y reí por lo bajo mientras iba a por mi bebida que ya estaba esperándome en la barra junto a donde se acercó ella a por la suya. No solía beber alcohol al menos hasta bien entrada la noche, ya que no me convenía si estaba "trabajando", pero obviamente tener por aquí a la hermana de Lucy me eximia de mi faena. -¿Eres la hermana de Lucy, no? -pregunté alzando una ceja y di un sorbo a mi copa, dejándola de nuevo sobre la barra mientras echaba un rápido vistazo a mi alrededor para tener controlados a los que tuviesen la estupida idea de acercarse a mi ahora, cuando estaba acompañado sabian que no era momento de venir. Volví mi vista a Kate y le sonreí.

-Sí, lo soy- respondí tajante sin muchas ganas de interactuar con él que parecía no tener mucha clase, incluso me costaba entender como alguien que lucía así podía estar en nuestra prestigiosa hermandad. Me aparté por instinto a un lado cuando sentí que mi brazo comenzaba a rozar el suyo ya que estaba a un costado de mí. Dios, el solo contacto de mi delicado brazo con esa espantosa chaqueta de cuero me daban escalofríos.
-Como es que lo haces?. - pregunté sin mirarlo al rostro -Ya sabes... pertenecer a nuestra hermandad y con esa pinta...- Negué con la cabeza y bebí de mi copa aún dirigiendo la vista hacia en frente.

Para ser hermana de Lucy no se le parecía mucho, al menos en carácter. Por lo visto había salido demasiado delicada como para tratar con gente de mi estilo, y eso no hacía mas que divertirme de sobremanera, ya que nunca había terminado de soportar a los pijos rematados, algo mas que obvio. -La gente me quiere... -dije sin mas y eché a reir. -Además mi familia tiene demasiado dinero, y eso me incluye... -me encogí de hombros restándole importancia y me incliné sobre la barra mientras me liaba un cigarrillo, al menos ya que tenía malos vicios me entretenía. -¿Acaso tienes problemas con mi estilo? -pregunté divertido mientras me encendía el cigarrillo una vez liado y di una larga calada mirandola con una sonrisita.

Alcé ambas cejas al oirlo hablar. -No puedes llamarle estilo a ...- Lo recorrí con la vista de arriba a abajo -eso- dije volviendo a mi posición rápidamente, dándole otra probada a mi copa. -No me interesa cuanto dinero tengas, pues sigues viéndote como un delincuente o algo así- dije sincera pues no me hacía gracia intercambiar palabras con alguien que parecía no tener siquiera modales básicos, aunque claro yo era demasiado prejuiciosa, siempre había sido así porque papá se había encargado que desde pequeña fuese una perfecta señorita y eso había hecho que fuese muy selectiva y por tanto prejuiciosa con las personas.

Solté una carcajada ante su critica sobre mi no estilo de vestir, vamos tampoco es que me vistiese a conciencia, yo me ponía lo que me gustaba y punto. Me apoyé con un brazo sobre la barra mirándola mientras alzaba una ceja. Vamos delinquente yo menuda idea... -¿Acaso pretendes que vaya de traje y corbata? -dije con sarcásmo. Como siempre cuestionaban mi forma de ser por mi ropa, no era mi culpa si mi prenda favorita era mi chaqueta de cuero. -Aparentaré ser lo que quieras y tendré malos habitos, pero trato mejor a las personas que muchos de esos con los que frequentas, eso seguro... -dije antes de dar otra calada. No me gustaba nada que me infravalorasen y menos sin conocerme.

-Primero que todo aleja ese humo de mi cara- dije sacudiendo mi mano para que se fuese el humo que había exhalado de su boca. - Y segundo, no tiene que ver solo con tu forma de vestir cariño, sino también con tu actitud... en serio, estuve a punto de sujetar con fuerza mi bolso por miedo a que me asaltaras...- Tras decir eso último no pude evitar reír, pero rápidamente mordí mi labio inferior para que la sonrisa desapareciera. No quería que llegase a pensar que con alguien como él yo pudiera divertirme. Miré al piso para no dejar rastro de mi risa y luego levanté la mirada denuevo al frente. -No te conozco pero tampoco me apetece saber más de ti, seguro la supuesta bondad que creer tener por sobre el resto de los que están acá no es más que palabrería.-

Rodé los ojos y eché mi siguiente exhalación de humo hacia un lado para no molestar a mi fina acompañante. Vale, en lo de mi actitud tenía razón, pero es que siempre había sido un tanto rebelde en ese sentido, por mucho que se hubiesen empeñado en convertirme en un fino pijo de la alta esfera yo siempre iba en contradirección. -Vale, en eso no te voy a recriminar... Pero la apariencia no lo es todo... -alegué en mi defensa. Reí por lo bajo ante su comentario sobre mi bondad. -No he de demostrar nada, cree lo que quieras... -me encogí de hombros aun sonriente y di otra calada alzando la vista, la sonrisa desapareció de mi rostro para fruncir el ceño mientras exhalaba el humo. Perfecto, el idiota de turno venía en mal momento a por su "alegría". Me separé un poco de la barra, por alejarme de Kate mas que nada y en cuanto le tuve en frente lo fulminé con la mirada. -Como no te vuelvas por donde has venido te vas a arrepentir de haber nacido, creeme... -dije mientras daba una calada mirando a otro lado haciendome el desentendido y rezando por que captase mi mala leche de seguida y Kate no alcanzase a oirme. Mi amenaza fue efectiva, por algo tenía buena mano con estas situaciones, me quedé ahí mirando como se iba con cara de pocos amigos mientras me terminaba el cigarrillo.

Arqueé una ceja al notar que quien intentaba ser una especie de nuevo amigo comenzaba a dejarme sola para irse a hablar con un tipo que traía una pinta similar a la de él. Rodeé los ojos - Tal para cual..."dime con quien andas y te diré quien eres"- murmuré el típico refrán. Con aquel escape de mi nuevo pero detestable compañero pude comprobar que sus modales dejaban mucho que desear.
Me senté en la barra y pedí otra copa en tanto noté que alguien ocupó la silla de al lado. En cosa de segundos entendí que se trataba otra vez de él que al parecer había tenido una plática breve con ese otro delincuente. - Hey no te aburres?, no me gusta que me vean contigo, pueden imaginar que te conozco o algo - suspiré mientras el barman me entregaba mi siguiente trago.

Regresé a la barra tras lanzar el cigarrillo al suelo y cerciorarme de que mi visita andaba bien lejos, me tomé el resto de mi bebida mientras reprimía una risa ante el comentario de Kate, menuda cabezonería de chica. -¿Tanta manía puedes tener a alguien que no conoces? -pregunté mientras pedía una bebida, ahora sin alcohol, que empezaba a estar seguro que mis vacaciones no durarían mucho a este paso. -Parece mentira que tu hermana y tu seáis familia, ¿seguro que no eres adoptada? -bromeé con ironia y reí por lo bajo.

-Que se haya chiflado no me hace adoptada idiota - respondí sin tomarle mucha atención a sus palabras. Bebí de mi copa otra vez y abri los ojos como platos al entender recién lo que me había dicho.- Conoces a mi hermana??? espera... ni se te ocurra acercarte a ella oíste???, aléjate de nosotras.- ya empezaba a atropellarme con mis palabras y eso me hacía sentir torpe así que preferí callar y dejar que el idiota que traía al lado respondiera de una vez a mis interrogantes. - Vamos responde!!- Cuando se trataba de Lucy, yo instintivamente sacaba mis garras, NADIE y absolutamente nadie le pondría un dedo encima.

Me la quedé mirando esperando su reacción y casi me da un ataque de risa al ver su cara cuando comprendió que con eso daba a entender que conocía a Lucy. Cuando conseguí parar de reír di un trago a mi bebida y suspiré mirándola con una ceja alzada. -Eh, tranquilizate... Si, nos conocemos... Somos buenos amigos... -dije aun con una sonrisita. Era increible como se ponía esta mujer, aunque claro si me veia como un delinquente era obvio que no me dejase acercarme a su hermana. -¿Por quien me has tomado? Jamás dañaría a Lucy... -dije algo molesto por sus insinuaciones.

Dios... ¿en que pensaba mi hermana cuando empezaba a coger ese tipo de amistades?.
Dejé la copa a un lado y tapé mi rostro con ambas manos tratando de convencerme de lo que estaba sucediendo -oh dios.. oh dios...- repetí en reiteradas ocasiones sin descubrirme el rostro. No podía hacerme la idea que éste tipo convirtiera a mi Lucy en una rebelde sin causa, pues en eso se transformaría tras ver los malos ejemplos de éste tipo que me resultaba tan indisciplinado. Masajée mi ceño aprovechando que traía aún las manos en la cara e intenté mantener la calma.

Me recosté con un codo sobre la barra mientras la miraba medio alucinado por tanto dramatismo, ni que yo estuviese convirtiendo a su hermana en una delinquente, como decía que yo era. Suspiré tomandome mi bebida de un trago y me pasé una mano por el pelo, revolviendomelo un poco. -¿Acaso le ha ocurrido algo a Lucy? ¿Las has visto diferente ultimamente? Porque no se si sabes que hace mucho que nos conocemos y yo la veo igual que siempre, no soy el diablo ni nada por el estilo, no pienso corromperla o lo que sea que te pase por la cabeza para montar este drama... -dije mirandola arqueando una ceja y rodé los ojos.

Aún cerrando los ojos quité una mano de mi rostro y con ella le jalé el pelo con fuerza buscando desquitarme de algún modo. -A callar!! - dije en un acto desesperado sin siquiera poner atención a sus palabras por más acertadas que fueran. Lo remecí un poco y luego le solté el pelo tras un prolongado suspiro. No tenía ganas de seguir escuchándolo pues de un momento a otro sentía que mi mundo de Barbie se derrumbaba por el hecho que mi hermana adorada se empezara a vincular con semejante espécimen. Negué con la cabeza para ahuyentar mis pensamientos y luego pegué mi frente al mesón de la barra maldiciendome.

Sacudí la cabeza revolviéndome el pelo de mala manera cuando me soltó, esta mujer tenía unos prontos que no le deseaba sufrir a nadie. Además seguía sin entender porque demonios tanto escándalo, yo no le había echo nada malo a Lucy y ella no era tan influenciable como para volverse como yo y menos aun cuando le mantenía mi faceta oscura bien oculta. -De verdad que exagerada... -dije negando con la cabeza.

Levanté la cabeza del mesón de la barra para mirarlo otra vez. - No opines cuando no tienes idea- Me levanté de la silla sin ganas de seguir dirigiéndole la palabra. Le di una propina al barman y terminé mi copa, bebiéndola por completo y dejándola con fuerza sobre el mesón.
-Me gustaría decir "gusto en verte" pero realmente no lo siento así- Quería tenerlo lejos de mi y mi hermana y si quería cumplir ese cometido no podía comportarme con él de forma muy amistosa, así que haría evidente mi trato hostil. Pasé entre la gente mirando por si acaso veía a Bill por algún sitio, pero aparentemente no se encontraba aquí, por lo que seguí mi paso hasta la salida dispuesta a telefonearle a Mike para que viniese por mi.